domingo, 6 de marzo de 2016

CON BALAS, NUNCA MAS


 

Los/Las militantes de Nuevo Encuentro Chubut  repudiamos el ataque con balas de plomo a los compañeros de Villa Crespo en  Buenos Aires, durante la inauguración de la sede partidaria. Anoche, dos mujeres fueron heridas de balas mientras participaban con otros 400 compañeros del acto de apertura del local de Nuevo Encuentro.

Exigimos una investigación exhaustiva para encontrar a los/las responsables materiales e ideológicos. Nos preocupa el contexto en donde el discurso violento emana prácticas de violencia institucional y ataques a militantes del kirchnerismo.  Nos recuerda los peores momentos de la historia Argentina de la intolerancia y no podemos permitir que el odio vuelva a imperar en nuestra sociedad.

El ataque a las compañeras de Nuevo Encuentro y los impactos de bala recibidos en el local de La Cámpora de Mar del Plata, son algunos de los tantos hechos que se produjeron en este tiempo que nos lleva a reflexionar sobre el retroceso que se está viviendo en democracia. Retroceso que está alimentado por un discurso institucional que estigmatiza a los militantes, no solo kirchneristas, sino de todas las agrupaciones políticas y sociales. Retroceso que condujo a que Milagro Salas, dirigente social de Jujuy sea una presa política en democracia, que las protestas de los trabajadores sean reprimidas y las balas de goma acallen las murgas de los niños y jóvenes. Retroceso que  está avalado por un protocolo de seguridad que permite silenciar los derechos de los trabajadores. Retroceso que lleva a que un dueño de un bar  expulse del mismo a una persona por hablar de política. Retroceso que produjo que un compañero de la Confluencia MP La Dignidad / Tupac Katari / OPSA, Julián Euguenio fuera atacado de un balazo en el pecho por un puntero del PRO.

Estos hechos son la causa directa de que algunos sectores se sientan  habilitados para acallarnos con balas a los que pensamos diferentes, a los que nos comprometemos políticamente para transformar la sociedad.

Como colectivo del campo popular debemos estar alertas, conscientes frente a la ola de violencia que se está viviendo en distintas localidades de Argentina. No podemos permitir que nos acallen ni con balas ni con el blindaje mediático. Hay una responsabilidad política en el clima de odio que se está generando porque existe un discurso violento desde el gobierno y un silencio responsable de muchos medios de comunicación.

La participación política es un derecho, y ha sido uno de los pilares de muchos movimientos sociales que han sido protagonistas de los logros de nuestra historia. La libertad de pensar distinto no puede ser acorralada con represión e indiferencia de la sociedad frente a estos actos de violencia.

A pocos días de recordar los  40 años del golpe cívico militar y los 3000 días más trágicos de la historia argentina repudiamos estas balas que nos quieren inmovilizar. Expresamos nuestra solidaridad con los compañeros afectados y volvemos a decir: “Con balas, Nunca Más”.